5 Obras para entender a Gaudí

Para el día de hoy les traemos un post muy especial – Vamos a hacer un recorrido por la biografía de Antoni Gaudí utilizando como hilo conductor las obras que encontramos del arquitecto en Barcelona. Aunque – ojo – vamos a utilizar obras un poco más desconocidas, ya que sobre …

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Para el día de hoy les traemos un post muy especial – Vamos a hacer un recorrido por la biografía de Antoni Gaudí utilizando como hilo conductor las obras que encontramos del arquitecto en Barcelona.

Aunque – ojo – vamos a utilizar obras un poco más desconocidas, ya que sobre la Casa Milá y la Casa Batlló – ya tenemos post específicos. Básicamente, queremos hacer una selección de 5 edificios que nos sirvan para entender la vida y obra de uno de los arquitectos más importantes de la ciudad, por lo menos el más importante de esta hermosa ciudad: Antoni Gaudí. ¡ Empezamos !

Un poco de contexto sobre Gaudí 

Pero bueno, vamos a empezar por el comienzo, y este puede ser un detalle que sorprenda a muchos, pero, Gaudí no nació en Barcelona. Antoni Gaudí nace en 1852 en – vamos a decir que nació en Reus, la capital de la comarca del Baix Camp, una región del sur de Cataluña.

Que existe una medio polémica en cuanto al lugar de nacimiento, porque parece ser que, efectivamente, nació en Reus, además se tiene la partida de bautizo que así lo certifica, pero, luego, en su edad adulta se la pasó diciendo que él en realidad era de Riudoms, que es un pequeño municipio situado a pocos kilómetros de Reus, porque, al parecer no lo habían dejado hacer una reforma de una iglesia en Reus, cosa que le molestó mucho, y por eso negaba haber nacido en Reus. 

Aun así, sabemos que Gaudí desde pequeño tuvo una salud débil, fue muy enfermizo, por lo que nunca pudo asistir con regularidad a sus clases en Reus, pasó largas temporadas, efectivamente, en Riudoms, donde su familia tenía una pequeña estancia veraniega. O sea, que de todas maneras se la pasó entre ambos lugares. 

Por eso yo creo que al final da un poco igual donde nació, creo que lo importante de esta primera etapa de su vida, es que Gaudí nace, crece, se forma, en un entorno principalmente rural. Y este tema no me lo estoy inventando yo, la mayoría de las biografías hacen referencia a cómo desde una edad muy temprana.

Gaudí va a desarrollar una sensibilidad muy especial por el entorno natural en que vivía. Que se la pasa mirando los paneles de abeja, estudiando las espirales de los caracoles, descifrando las formas de los árboles; desde muy pequeño se interesó por todos estos secretos que guardan las formas orgánicas. Para Gaudí la naturaleza era “un gran libro, siempre abierto, y que uno debía esforzarse en leer”.

Pero bueno, continuemos, porque además de venir de un entorno rural, podemos decir que Gaudí viene también de un entorno artesanal. Más de cinco generaciones en su familia trabajaron en la manufactura de productos de cobre, eran caldereros, un oficio del que Gaudí estaba muy orgulloso, por cierto, decía que fue gracias al oficio de su padre que desarrolló cierta habilidad a la hora de entender el espacio y el volumen. Que por esto tenía una imaginación espacial bastante singular.

Aun así, Gaudí no va a continuar con esta tradición de su familia – Gaudí nace en un época bastante bisagra – en la que se estaban dando cambios casi que en todos los niveles de la sociedad – y esto de dedicarse al oficio de tu padre estaba pasando un poco de moda. Es por este motivo que la familia de Gaudí va a hacer un “esfuerzo económico” y van a vender algunas propiedades para enviar a sus hijos varones a la universidad. 

Y es de esta manera en la que Gaudí desembarca en Barcelona – que en esta época era la ciudad de los prodigios – estaba en plena revolución industrial – además de que estaba experimentando un desarrollo culturas sin precedentes – Que sobre esta temática tienen una serie de 3 post en nuestro blog.

Gaudí llega a Barcelona y es aquí donde estudia arquitectura, pasa el resto de su vida, pero sobre todo, en Barcelona desarrolla la mayoría de sus obras. 

Por esto a partir de aquí empezamos el post, vamos a hacer la lista de las 5 obras esenciales para entender a uno de los arquitectos más universales de la historia. El más importante de la ciudad: Antoni Gaudí

Las Farolas de la Plaza Real 

Entonces, Gaudí llega a Barcelona en 1868, termina la enseñanza media, y luego, finaliza sus estudios en la Escuela de Arquitectura de la que se gradúa en 1878 con 26 años. 

Esta época de estudiante que me gusta mucho  – tengo que admitir – porque sabemos qué tipo de estudiante era Gaudi – era un pésimo estudiante. Parece ser que no iba mucho a las clases, se la pasaba leyendo, investigando diferentes arquitecturas, un poco más exóticas por cierto, se la pasaba en conciertos, en el teatro, en algunas tertulias intelectuales, además de que empezó a empaparse con toda la historia y la arquitectura que había no solo en Barcelona, sino en cataluña, se la pasaba de excursiones y de viajes. 

Otro aspecto interesante de su etapa de estudiante es que – como como nombramos antes – su familia no era la más adinerada del mundo – por este motivo, mientras Gaudí estudiaba tuvo que trabajar como delineante para algunos arquitectos – ya de renombre en la ciudad – y bueno, parece que fue gracias a estos contactos, en especial el trabajo con Joan Martorell, lo que permite que Gaudí empiece su vida laboral y reciba su primer encargo municipal. 

Entonces, la primera obra de Gaudí se trata de estas farolas, que las encontramos en la Plaza Real en la zona antigua de la ciudad en el Barrio Gótico (Inauguradas en 1879). No les voy a dar muchas indicaciones porque estando en la plaza las van a identificar rápidamente, creo que no es muy usual encontrar farolas así de coloridas y con tantos detalles. 

Pero bueno, para ser la primera obra de Gaudi yo creo que es toda una declaración de intenciones. A pesar de que Gaudí había sido un estudiante un poco “disperso” y que este – primer – encargo debía ser, en teoría, un trabajo “sencillo”, yo creo que se alcanzan a vislumbrar las cualidades creativas y un poco – la osadía – que tenía Gaudí a la hora de concebir sus obras.

Y esto parece ser que estuvo desde el comienzo, por eso siempre se recuerda como el director de la Escuela de Arquitectura, cuando Gaudí se estaba graduando, llegó a afirmar que no sabía si le estaba dando el título a un genio o a un loco. Que el tiempo lo iba a decir.

La Casa Vicens 

Entonces, poco tiempo después de las farolas –  el mismo año – Gaudí recibe el encargo de la Casa Vicens, la cual la podemos encontrar en el distrito de Gracia. Con esta obra se inaugura formalmente la carrera de Gaudí, es su primer gran proyecto, además, de que con esta casa inauguramos la primera etapa del arquitecto, llamada la Etapa Orientalista. 

La verdad es que es una casa bastante ecléctica, en la que Gaudí logra una primera síntesis de lo que hasta el momento él entendía por la arquitectura. Por un lado tenemos una clara influencia del arte oriental – la arquitectura que podemos encontrar por ejemplo en la India, Persia, Japón.

Y es que – debemos tener en cuenta – que en esta época se está despertando cierto interés por estilos un poco más exóticos, incluso, en el caso de España, se empieza a redescubrir el estilo hispano-árabe – nazarí – que tanto desarrollo había tenido en el sur. — Parece que Gaudí tenía una auténtica fascinación por la Alhambra, por ejemplo. 

Todas estas influencias están presentes en la casa, pero luego, hay otro aspecto que empieza ya a tomar mucho protagonismo, que sería la presencia de la naturaleza dentro de los elementos decorativos de la casa.

Según las palabras de Gaudí, cuando fue a tomar medidas, el solar estaba totalmente cubierto de las mismas flores amarillas, que luego utiliza como tema ornamental en las cerámicas. Cuenta también que encontró una palmera totalmente exuberante, que forjó en hierro, y que también usó para formar la valla y puerta de la casa. Y como esto mil ejemplos más, Gaudí al final logró integrar toda la flora y fauna que había alrededor a la arquitectura de la casa. 

Todo esto, sumado a los elementos orientalistas, dan como resultado una de las casas más originales de Gaudí. Es una casa que la gente no suele visitar mucho, pero yo creo que es maravillosa, además que si hoy en día – llama bastante la atención – y las personas pueden estar un poco acostumbradas al estilo de Gaudí – imaginense en la época que fue construída – debió ser muy sorprendente tener una casa así en plena Gracia.

El Palau Güell

Vamos a ver ahora la tercera obra. Lo curioso es que seguimos en el mismo año – porque – el mismo año que recibe el encargo de las farolas y de la Casa Vicens, Gaudí recibe también un proyecto, un poco menor, ya que debía fabricar unas vitrinas para la Guantería Comella – las cuales iban a estar en la Exposición Universal de París de 1878. Y bueno, este suceso de las vitrinas se nombra bastante, en las biografías de Gaudí, ya que fue gracias a este encargo que el industrial catalán Eusebi Güell se pone en contacto con Gaudí

A partir de aquí empezaría una relación entre ambos muy estrecha, una relación de mutua admiración, tenían aficiones compartidas, pero, lo más importante, es que a partir de aquí, Güell se convierte en el mecenas de Gaudí.

Y estamos hablando de un mecenazgo prácticamente renacentista – Güell le va a dar todo el apoyo, la libertad – el dinero – para que Gaudí pudiera desarrollar su talento y cualidades artísticas. Además que claro, ser amigo de una de las personas más adineradas e influyentes de la ciudad, ayudó en que Gaudí estableciera nuevos contactos y participara en proyectos cada vez más ambiciosos. Por esto siempre se nombra el suceso de los guantes. 

De todas las obras que Gaudí hizo a Güell, vamos a destacar el Palau Güell, en la calle Nou de la Rambla, nuevamente en la zona antigua de la ciudad. Si bien es un obra que sigue estando en la etapa orientalista de Gaudí, está en sintonía con la Casa Vicens, personalmente – creo que es una obra un poco más atrevida de Gaudí – más trabajadas también, ya que se trató de la primer obra que Gaudí le hace a Güell, por lo que le pone bastante empeño. 

Esta casa tampoco es la más visitada de Gaudí, además que cuando uno ve la fachada, que es más bien tosca, no creo que se alcance a imaginar todo el lujo y la opulencia que Gaudí despliega en el interior del palacio. Yo creo que tendría que visitarla solo para ver con sus propios ojos el salón central – el cual está coronado con una cúpula parabólica que al sobrepasar la altura de la azotea permite la entrada de la luz a través de unas perforaciones que hace Gaudí. Parece como un planetarium. A mi me encanta. 

Pero bueno, incluimos esta obra, porque tener, justamente, este promotor va a ser fundamental para el desarrollo de la obra de Gaudí. A partir de aquí Gaudí participa de proyectos cada vez más ambiciosos y su estilo se va consolidando. Se dice también que en esta etapa de su vida Gaudí tenía un aspecto de dandi, que le gustaba utilizar trajes caros, que iba siempre muy arreglado y que le gustaba frecuentar los teatros de la ciudad. Que iba incluso en carruaje. En esta etapa de su vida – tenemos a un Gaudí disfrutando de todos los discretos encantos de la burguesía. 

El Colegio de las Teresianas 

Llegando a finales del siglo XIX, Gaudí se ha establecido ya como uno de los arquitectos más importantes de la ciudad, empieza a recibir cada vez más encargos, incluso su fama se empieza a extender por toda España.En esta época empieza también la segunda etapa de su trayectoria llamada la Etapa Neogótica, momento en que Gaudí parece ahora inspirado por el arte gótico medieval.

Aunque, tenemos que decir que Gaudí recrea este estilo muy a su manera – él consideraba de que esta arquitectura era imperfecta – decía – por poner un ejemplo – que las catedrales de la Edad Media tenían que utilizar muletas para sostenerse – en cambio que Gaudí utilizaba arcos catenarios que le permitían liberar al edifico de todos estos contrafuertes y arbotantes. Gaudí estaba experimentando con todos estos elementos. 

De esta etapa vamos a destacar al Colegio de las Teresianas, que se encuentra en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, aunque de toda esta lista que estamos haciendo, es la única obra que no se puede visitar ya que es un colegio privado. Pero bueno, la incluimos porque creo que es uno de los mejores exponentes de esta etapa, además de que es una de las obras más austeras de Gaudí, ya que el voto de pobreza de la orden le impedía levantar un edificio ostentoso. 

De hecho, sobre esta construcción, siempre se nombran las peleas que tuvo Gaudí con Enrique de Ossó, sacerdote que había encargado la construcción, que no hacía otra cosa más que decirle a Gaudí todo el tiempo que se tenía que ceñir al presupuesto, a lo que Gaudí le termina respondiendo que cada uno debía estar a lo suyo: Gaudí a hacer casas y Enrique a hacer misas. 

Pero bueno, a pesar de las discusiones que estaba teniendo con este sacerdote, fue en esta etapa de su vida en que encontramos a Gaudí cada vez más rodeado de un entorno eclesiastico. Digamos que poco a poco fue dejando atrás esta vida burguesa de los placeres y gustos materiales, hasta convertirse en una persona sumamente religiosa – Esto fue una evolución paulatina hasta el punto en que, en sus últimos años de vida, Gaudí llevó una vida totalmente ascética. No por nada Gaudí es conocido como el arquitecto de Dios. 

Esta etapa, la Neogótica, sería la última etapa de exploración – porque ya empezando el siglo XX – es el momento en que Gaudí configura un lenguaje arquitectónico, casi que único, personal, a veces un poco difícil de definir. Vamos entonces a finalizar el video con la última obra de esta etapa. 

Sagrada Familia 

Yo se que al comienzo dije que no iba a incluir obras conocidas de Gaudí – y esta es su obra más famosa, incluso siendo una iglesia inacabada y con un estilo indescifrable, podría ser una de las iglesias más reconocidas del mundo. 

Pero, la verdad es que la Sagrada Familia es una obra que logra resumir bastante bien todo este viaje personal que hace Gaudí a lo largo de su vida. Especialmente la Fachada del Nacimiento, que de las 3 fachadas que tiene la iglesia fue la única en la que trabajó Gaudí – el resto fue hecho posterior a su muerte – por lo que nos sirve para entender este momento de plenitud en su obra. 

Y bueno, lo primero que tengo que decir es que, a pesar de que dejé la iglesia para lo último, la Sagrada Familia fue uno de los primeros encargos que recibió el arquitecto. Esto no lo saben muchas personas, pero fue al inicio de su carrera, cuando Gaudí tenía apenas 31 años, que empezó la construcción de este templo. Lo que pasó fue que él siguió construyendo la iglesia, durante 43 años, de manera paralela al resto de proyectos que he ido nombrando. 

Pero bueno, ya para ir concluyendo, con la llegada del nuevo siglo, Gaudí inicia su periodo más creativo, es por esto que sus obras más icónicas e importantes son del siglo XX, además de que en este punto Gaudí ya era una especie de leyenda viviente en la ciudad – era un personaje muy reconocido. 

Todas estas construcciones hacen parte de la última etapa de su trayectoria conocida como la Etapa Naturalista en que Gaudí logra como — desplegar todo su armamento — después probar muchas cosas, de experimentar con diferentes estilos, sobretodo, después de volver “suyas” todas estas formas de la naturaleza — después de haber reunido toda esta experiencia – Gaudí logra desarrollar un lenguaje arquitectónico propio – llega a este punto de máxima madurez creativa. 

Paradójicamente, este esplendor coincide con un progresivo retraimiento de su figura. En esta época van a morir muchas personas de su entorno más cercano, habló de su familia, pero también de sus amigos más cercanos como Güell, además en la ciudad hay un par de sucesos que también hacen que Gaudí esté cada vez más introspectivo. 

En sus últimos años, Gaudí deja los carruajes que nombramos antes, dicen que se movilizaba únicamente a pie, además que en esta época vivía en total pobreza y castidad, que Gaudí nunca se casó ni tuvo hijos. Se habla también de que su aspecto físico estaba bastante desmejorado porque Gaudí era medio vegetariano, o bueno, tenía una dieta muy estricta siguiendo las teorías de un médico naturista alemán. 

Incluso sus últimos años de vida, Gaudí se traslada a la Sagrada Familia, donde va a tener su casa, su taller, pero también, lo que se iba a convertir en su obra maestra. Y bueno, fue un 7 de de junio de 1926, después de terminar una jornada de trabajo, que Gaudí sale de la Sagrada Familia en dirección a otra iglesia, la de San Felipe Neri, donde estaba su confesor, pero al pasar por la Gran Vía de las Cortes Catalanas, es atropellado por un tranvía. Parece ser que el golpe no era para tanto, pero nadie lo reconoció, por lo que parece que no recibe la atención necesaria. 

Antoni Gaudí muere el 10 de junio de 1926, con 73 años de edad probablemente en la plenitud de su carrera. 

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